26 de marzo de 2015

Hoy estaba sirviendo la merienda en el jardín donde trabajo cuando veo a una de las nenas llorando y a otra casi encima de ella diciéndole algo.  Generalmente lo que pasa en estas situaciones es que una le dice a la otra "mala", "fea", "no sos mi amiga".  Y cuando sos chiquito las cosas dañinas que te dice un(a) compañerita/to impactan mucho.  
Entonces me acerqué a la mesa en cuestión y pregunté que estaba pasando.  Una tercer nena me dice: "Ella (a la que voy a llamar Pilar) le dijo a ella (a la que voy a llamar Paula) que tiene una taza de nene".

De nene.

Yo que me eduqué bajo la premisa de que soy nena y tengo que usar vestido y tener el pelo largo me gané la burla de todos y todas mis compañeros de jardín y primaria porque desde chiquita me gustaba el fútbol, el rock; y me portaba... como nene.  

Porque yo nunca fui nena.  Yo siempre fui yo, Paula.  

Miré a Pilar y le dije "No Pilu, la taza no es de nene, la taza es de Pauli".  Cuando me doy vuelta escucho que Pilar, bajito, le dijo a Pauli: "tu taza es de nene".  Entonces vuelvo, agarro la taza, la miro.  La taza era de Aviones -la peli de Disney.  "A ver Pilu, vos fuiste a ver Aviones?  No te gustó?  Bueno, a Pauli le gustó tanto que se compró una taza".  La nena que estaba al lado (le voy a poner: India) me dice "sí, mi mamá también me compró una taza de Aviones, está buenísima!".  Pilar se quedó callada.

16 años atrás un compañerito me dijo "machito" porque mi mochila tenía un llaverito de River Plate.  Y así siguió mi vida hasta ese momento de la primaria donde los chicos dejan de ser tan etiquetadores.  
16 años.  Y los prejuicios siguen siendo los mismos.  (Yo sé que la lucha es larga).

16 años y los padres siguen enseñando qué es "de nena" y "de nene".  

Más allá de la vil insistencia del sistema capitalista-patriarcal que te vende "de nena" y "de nene".  Somos nosotros futuros padres quiénes tenemos el poder de cambiar "de nene" y "de nena".  

Ni mujeres, ni hombres; personas.

1 comentario:

  1. Totalmente cierto e identificada. Somos los que amamos y eso es hermoso.

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